Esta pandemia ha disparado los casos de violencia intrafamiliar y situaciones de intolerancia entre vecinos y familiares, pero llegar a matar a un hijo por una pelea de pareja y hacerle creer a la policía que se lo habían secuestrado, es la última locura en plena cuarentena, ocurrida en un municipio de Venezuela.
EL hecho ocurrio en Guarenas, ciudad del estado Miranda, cuando una pareja discutió la semana pasada y en la pelea, ella arrojó al bebé de 3 meses de nacido contra el piso causandole la muerte de manera instantanea. Los padres del menor, identificados como Belexis del Mar Morales Alcalá, de 33 años, y Chery Alberto Ríos Pérez, de 49, manifestaron a la policía del lugar que dos hombres en motocicleta les habían raptado a su hijo y se fueron con rumbo desconocido.
Quien asumió la investigación fue Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc), del país vecino, quien empezó a indagar con los vecinos de la pareja para buscar pistas de los secuestradores, pero todos los entrevistados dijeron nunca haber presenciado nada, hasta que un vecino habló de la cal que le pidió el padre del menor en esos días, con lo cual el investigador sospechó de la mentira y los interrogó hasta que confesaron la macabra situación.
Metieron a su bebé a la nevera, después lo untaron de cal para que no se descompusiera y posteriormente lo enterraron en un solar cerca de su casa, a donde en efecto la policía encontró el cuerpo de la criatura. Todo por una pelea marital y un ataque de ira donde el que pagó fue un niño inocente. Las 2 personas ya están tras las rejas y serán procesadas por homicidio.